martes, 4 de octubre de 2011

If I were a cat


El otro día escuché la canción de Beyonce, If I were a boy, y me puse a pensar. No pensé cómo sería ser hombre, porque ¿quién querría eso? No, pensé cómo sería ser gato.

Si yo fuera gato (gata), aprovecharía las tardes para dormir al sol.
En invierno, me apropiaría de las estufas, de las laptops y de los regazos de mis humanos para entrar en calor.
No aceptaría ninguno de esos alimentos balanceados que parecen caquitas de cabra, no. A mí me darían latas de atún o esos paquetes que vienen con salsa. Además, me dejarían preparado un platito de leche todos los días.
Ninguno de mis humanos trataría de sacarme del sillón/cama, porque sabrían quién manda.
Lo haría todo con elegancia, porque así son los gatos, y tendría algún nombre como Semjet (la diosa leona de los egipcios, diosa de la guerra) o Ishtar (diosa de la Mesopotamia). ¡No! ¡Ya sé! Si fuera gata, me encantaría llamarme Morgana.
Ignoraría a mis humanos salvo cuando necesite rascadores de orejas.
Cuando entrase en celo, me escaparía a la calle a dejar que dos gatos malos y llenos de cicatrices peleasen por mí.

Qué vida. Lo único que no me atrae es escupir bolas de pelo.

3 comentarios:

Paula dijo...

JAJAJAJAJAJAJA

Muy buena reflexión del día.

Hugo dijo...

El único problema que le encuentro a ser gato es si a uno lo castran sin pedirle permiso.

Sidonie dijo...

cierto. pero mis humanos no me harían eso. ganarían plata vendiendo mis preciosos bebés (???)