miércoles, 8 de febrero de 2012

He descubierto algo

Hoy fui a depilarme (finalmente).
Estoy acostada en la camilla, boca arriba.
Betina (la depiladora) me acomoda la pierna izquierda para que la abra un poco, y con una espátula de madera me desparrama cera por el interior del muslo. Me hace cosquillas, y quedo suspendida en ese momento de placer, sabiendo que en unos segundos va a venir el dolor.

Gentes: descubrí algo.
Todavía siento placer.
NO ESTOY MUERTA!!!!!

Vamos, carajo. Estoy contenta.

4 comentarios:

Gonzalo dijo...

eh... ¿¿Cuando moriste?? :P

Paula dijo...

Comprendo, comprendo. Sí, la cera calentita es linda... pero después agarrate, Catalina. XD

Pero muy erótico lo tuyo. Yo a la depiladora le cuento mi vida y obra... como estás en un estado de entrega absoluta y en pelotas, es lo más coherente, ¿no?

Sidonie dijo...

ehh... no. si hablamos del clima, todo bien, pero yo no lo cuento vida y obra a todo el mundo. justamente porque el cuerpo está entregado me guardo la mente, cachai? si no, dónde está el misterio?
(y ya con esa frase me recibí de jodida profesional)

Paula dijo...

Jajajaja, yo al revés... me siento tan desprotegida que la uso de psicóloga. XD