viernes, 30 de septiembre de 2011

Sorpresas te da la vida III

Hoy estaba cocinando. Rompí un huevo y cayeron de él dos yemas. ¡Eran gemelitos!
Lo que podrían haber sido dos pollitos iguales hasta la última manchita del pico, ahora son waffles. Jeje.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Lógica

Cómo sé que nunca podría ser una diosa: los dioses no duermen.
Qué embole.

Cosas que pasan II

Tuve una buena tarde así que venía de buen humor. Empecé a cocinar. Como había sobrado arroz de ayer, hice una tortilla. Traté de darla vuelta y me quemé. Intenté de nuevo, y la quemadura me ardía por estar cerca de la sartén caliente. Entonces se me resbaló el plato se me cayó toda la tortilla sobre la hornalla. Tuve que apagar el fuego y tratar de rescatar lo que se había caído. No quedó mal, el gusto es el mismo, pero se veía tan triste cuando la llevé a la mesa.
Si comía yo sola no importaba, pero estaba cocinando para mi hermano también. No dijo nada, pobre santo, se comió la tortilla desmadejada sin una sola palabra, y encima me preguntó si me había puesto Pancután en la quemadura.

Yo sé, una tortilla caída y triste no es el fin del mundo, pero ya que hago poco en esta vida, me gustaría hacerlo bien.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Sorpresas te da la vida II

Hoy, 9 am.
Me subo al 29. Pago el boleto con mi bienamada Sube y voy a sentarme en el único asiento libre, al fondo del colectivo. A medida que me acerco noto una manchita blanca sobre el asiento. Será un boleto abollado, pienso. No. El cierre de la campera de la chica en el asiento de al lado. No. Llego al asiento.
Era un chicle masticado.
O_O
Lo corrí como pude y me senté. Yo digo, ¿no?, puede ser que a uno se le caiga el chicle de la boca. Ha pasado. Uno se distrae y ¡zas!, cae. Ahora... ¿cuán opa hay que ser para no darse cuenta de que tenías algo en la boca y no está más?
¿¿¿Y cuán hijo de puta y sorete de mierrrda hay que ser para bajarse y dejar el chicle en el asiento?????
No entiendo a la gente, no la entiendo. ¿Por qué no se pegan el chicle a la frente, así no lo pierden?

Estaba en tal estado de shock que simplemente lo corrí para poder sentarme, cuando lo que debería haber hecho era sacar un pañuelito de la cartera, envolverlo, rastrear al sucio repugnante que lo tiró y hacérselo tragar.

Este tipo de personas debería aparecer en Irreflexiones Arbitrarias, en las categorías de "Incitación a la violencia", "Mal gusto", "Asquito", "Servicio a la comunidad" y "Bondis".

Dios, ayudános a no ser taaan sucios, porque si seguimos así nos vamos a ahogar en nuestra propia basura.

domingo, 25 de septiembre de 2011

Maldito blogger

Tengo problemas.
Con Blogger. Con todo lo demás también, pero desde ayer estoy enojada con esta cosa. Anoche quería subir un video. Y tenía que ser sábado a la noche, porque no es lo mismo que domingo a la noche. No tiene onda el domingo. Peeeeero... no se carga el video. No sé qué pasa. Damnation! Tan complicado tiene que ser?

sábado, 24 de septiembre de 2011

Sueños II

Anoche soñé con un compañero del colegio. Es la tercera vez en dos semanas que me aparece mientras duermo. Esta vez, yo estaba en Miami comprando ropa con una amiga. Estaba haciendo la fila para el probador cuando lo vi. Tenía una remera blanca y el diario en la mano. Lo miré fijo hasta que me reconoció, y sonreimos. Lo abracé y recuerdo no querer soltarlo. Me explicó que se había mudado ahí para ver a su hermano, pero que ahora tenían un bebé en la casa, por lo que él se pasaba todo el día en el shopping, leyendo el diario. Parecía tan perdido, pobrecito.

¿Qué quieren decir estos sueños? ¿Me está llamando? ¿Se murió? ¿Nos encontraremos por la calle algún día de estos?

viernes, 23 de septiembre de 2011

Sorpresas te da la vida I

Entré a una librería en Cabildo para comprar un regalo. No tenía mucho tiempo, ya sabía lo que quería y dónde estaba, pero es imposible no mirar las mesas de libros. Di una vueltita. Había un empleado acomodando cosas que de vez en cuando me miraba (al parecer tengo cara de ladrona de libros) y otra al fondo del local, en la caja. Cuando me cansé de mirar cosas que no podía comprar, fui a pagar lo que había elegido (Desorden moral, de Margaret Atwood).
"Hola", le dije a la chica que estaba detrás del mostrador. Ni bola me dio. Entonces escucho desde atrás: "Hola". Escrito así suena normal, pero la voz no era normal. Era una voz profunda y sexy. Llega por fin el empleado al mostrador, le doy el libro. Me quedo mirándolo (espero que no haya sido con la boca abierta). Era un flaco normal, medio bajito, con rulos y ojos claros, con pinta de estudiante de carrera humanística eterna (Filosofía, diría yo) y un sweater horroroso que debería quemar. Yo no podía creer que semejante voz saliera de un tipo tan flacuchito. Bueno, le pagué, lo saludé, etc; pero me quedé pensando. Qué loco, ¿no? Nunca lo hubiera esperado.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Lost in translation

Me está pasando algo muy extraño. Hace un tiempo que estoy bloqueada para escribir. Primero no tenía ganas, después tenía ganas pero no podía. Tengo las ideas, pero no puedo sentarme a escribir.
Venía pensando en un poema, pero siempre que llegaba a la palabra "omóplato" abandonaba todo intento. ¿Quién puede escribir con algo que suena tan mal? ¿A alguien de habla inglesa, "shoulder blades" le sonará tan mal como "omóplato" me suena a mí?
De repente, una luz se prendió. A mí me gusta decir shoulder blades. Entonces, ¿por qué no escribir en inglés?
Y eso estoy haciendo. Hasta ahora he generado tres hojas de mala poesía, ¡en inglés!
Algo es algo, ¿no?

martes, 20 de septiembre de 2011

Festejo

Mañana es el día de la Primavera/del Estudiante. Odio la primavera y detesto a los estudiantes. Pensé dos opciones para festejar tan glorioso día: uno) no salir de mi casa en todo el día y fingir que es cualquier día menos 21 de septiembre, para no toparme con hordas de pendejos que inundan las plazas, el transporte público y el aire respirable. dos) salir de casa con una ametralladora para toparme con hordas de pendejos.
Qué dilema.

lunes, 19 de septiembre de 2011

A way out

Estos días, cada vez que me despierto, puedo recordar qué estuve soñando. Nunca me pasa tan seguido. Tuve tantos sueños desde el jueves hasta hoy que estoy casi segura de que me olvidé de anotar alguno. Hoy, por ejemplo, me levanté y supe que había soñado con un compañero del colegio, y también que tenía que hacer tarea de latín (ya no más, a Dios gracias). Durante la siesta soñé que viajaba en el 152, que estaba usando una pollera y no tenía puesta ropa interior. Iba a bailar (¿qué me pasa con ir a bailar últimamente?), me encontraba con gente conocida (no sé quiénes eran, no me acuerdo, pero sé que los conocía) y nos subíamos a un auto. En fin, sueños y más sueños.

¡Basta! Quiero hablar con gente, necesito salir de mi propia cabeza. Hoy ya entré tres veces a Blogger, buscando quién sabe qué.
Odio la primavera y el calor (?)

sábado, 17 de septiembre de 2011

In nomine Bloggis

Sí, me cambié el nombre de usuario. Ya no me identificaba con el otro, y éste siempre me gustó mucho. Lo encontré hace tiempo en un libro, y enseguida me llamó la atención. Después busqué el significado y me gustó todavía más.
Dejo el avatar por ahora así me reconocen, espero.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Sueños

Estoy teniendo sueños muy bizarros:

Iba a ir a bailar, sola. Estaba por entrar al boliche pero me dijeron que no, que esperase cinco minutos más. Vi que estaba medio vacío porque era temprano, y yo necesitaba que estuviera lleno de gente para pasar desapercibida, para hacer lo que tenía que hacer. Llegaron dos amigas y decidí no entrar, no quería que nadie que me conociera viese lo que iba a hacer. Salimos, empezamos a caminar por Corrientes. Recuerdo que el 60 paraba justo al lado de una estación de la línea B. Yo tenía varias bolsas en las manos, paré el colectivo y subí sola. Por supuesto, el lector de Sube no andaba, así que tuve que sacar el monedero y poner cuatro mil quinientas monedas de veinticinco en la máquina. Después me senté en el primer asiento, cosa que jamás hago en la realidad. El colectivo iba por una calle de tierra, era de noche, y yo pensaba que era una lástima que fueran a interrumpir ese ramal, pero que claro, el servicio Bariloche-Salta no tenía mucha gente (¿?). Entonces controlaba las dos bolsas de supermercado que tenía encima, en una había un gato todo enroscado durmiendo y en la otra un gatito. Y seguimos viaje, creo.

Y otro:
Estaba sentada en el piso, enfrente de un televisor grande, recostada sobre un puff color crema. Estaba empezando una película cuando me quedé dormida y entré en la historia que estaba mirando. Llevaba un vestido antiguo y estaba subiendo unas escaleras. Veo una placa en la pared, veo palabras escritas en azul oscuro, algo de “la ley”, entonces la frase suena en mi cabeza como si alguien estuviera leyéndomela, como un mantra: “En un gobierno perfecto, se comen a los niños”. Yo lo entendía como que cuando una sociedad alcanza un gobierno perfecto, la gente empieza a comerse entre sí. Subo otro piso de escaleras y veo una mano siendo ofrecida a una mujer, que empieza a morderla. Corro, salgo al exterior, veo una pileta y me tiro, sabiendo que no me va a salvar pero me va a dar un poco de tiempo, trato de no salir a la superficie y despertarme. Lucho por salir del sueño y me encuentro tirada en el puff, frente al televisor prendido. Entonces me desperté en mi cama.

martes, 6 de septiembre de 2011

Cosas que pasan

Me subo al 59 en Cabildo.
"Hola. Uno diez con tarjeta, por favor.", le digo al chofer.
"Pasá", me contesta. Lo miro. "Pasá nomás".
Y pasé sin pagar.

Aclaro que tenía la campera cerrada, por lo tanto no estaba mostrando nada indecente y tampoco se veía mi cadenita de Independiente (podría haber sido de Boca el señor).
Entonces...

WTF????